Estado de situación actual que atravesamos los centros de inclusión y las familias que acompañamos

Por Lic. Tamara Saúl

Estado de situación actual que atravesamos los centros de inclusión y las familias que acompañamos

Estamos atravesando un contexto muy difícil para las familias y los centros que acompañamos a sus hijos e hijas en su inclusión a la escuela común: hay más demanda de niños y niñas que requieren de la prestación, que disponibilidad de Profesionales de Apoyo a la Inclusión que puedan cubrirla.

Desde que reabrimos las admisiones en septiembre del año pasado, no cesaron de contactarnos familias solicitándoles que les consigamos profesionales porque uno u otro centro no había podido hacerlo. Nosotras le respondemos que es una problemática que va más allá de la capacidad o calidad del centro, sino que es un problema de la época que estamos atravesando: hay escasez de profesionales que se dediquen a cubrir inclusiones escolares. Los y las profesionales optan por tomar trabajos en otras áreas en las cuales los honorarios se condicen con propuestas económicas más beneficiosas.

Afortunadamente, en el año 2021 se recibieron aumentos al ¨Nomenclador Nacional de Discapacidad¨, pero como años anteriores no se había obtenido casi ninguno, no alcanzó para llegar a un honorario para las y los profesionales que los convoquen a querer trabajar en el área.

El ¨Nomenclador de Prestaciones de Discapacidad¨ es el que establece lo que los centros y profesionales de inclusión cobraremos por el servicio brindado, y el ¨Mecanismo de Integración¨, que pauta la Superintendencia de Servicios de Salud, es el que estipula los TIEMPOS en que los centros cobraremos dichos honorarios. Es decir que NO PODEMOS DECIDIR NI EL MONTO A COBRAR NI CUÁNDO LO HAREMOS. Generándonos un déficit enorme ya que la mayoría de los casos que cubrimos los cobramos a los 90 y hasta 120 días de haber presentado la factura.

Creemos que es fundamental que haya transparencia y conocimiento acerca de cómo funciona un centro de inclusiones escolares, cómo debe estar constituido ediliciamente y profesionalmente para contar la categorización de la ANDIS (Agencia Nacional de Discapacidad) y poder funcionar día a día. Para poder ubicar los reclamos, criticas y quejas en los canales que corresponden.

Para poder seleccionar y acordar la incorporación de una profesional de apoyo a la inclusión en un caso que iniciará en febrero o marzo, previamente, desde noviembre y diciembre del año anterior es que los centros debemos hacer ENTREVISTAS DE ADMISIÓN a las familias, preparación de la DOCUMENTACIÓN ADMINISTRATIVA para presentar a las obras sociales y por supuesto, ENTREVISTAS DE SELECCIÓN DE PROFESIONALES CON SUS RESPECTIVAS EVALUACIONES Y ANALISIS DE PERFILES, etc. Es decir que para que la profesional esté lista para comenzar al inicio del ciclo lectivo debemos llevar a cabo tareas por parte de psicólogas de Recursos Humanos, administrativas y psicólogas del área de admisiones que ninguna obra social reconoce para abonar. Y muchas veces todo este trabajo no llega a poder dar los resultados que esperamos, porque nos encontramos con que las obras sociales no autorizan lo solicitado, o no conseguimos seleccionar las suficientes profesionales de apoyo a tiempo ya que no se postulan. Y cuando comenzamos a poder facturar el caso desde febrero o marzo, sabemos que lo cobraremos a los 90 o 120 días.
Hay tareas que no son reconocidas y por momentos es muy ingrato el trabajo que llevamos a cabo.

Las profesionales de apoyo que se comprometen con los casos permanecen a la espera del cobro, al igual que los centros, varios meses, teniendo que de todos modos comenzar a brindar el servicio.

En ocasiones sucede que la obra social demora en emitir la autorización de la prestación y la familia del niño/a no puede comenzar a recibir la misma ya que no consigue la cobertura a tiempo. Convengamos que reclamar que se brinde un servicio sin cobertura de la obra social es como querer ir al cardiólogo y pedir que lo atiendan sin el carnet de la obra social. Ningún prestador de servicios de salud se arriesga a trabajar sin cobertura. No obstante, a veces es dificultoso que las familias comprendan la necesidad que tenemos los centros y los profesionales en recibir la confirmación de que el caso será cubierto. Y nos ha sucedido en reiteradas ocasiones que se comienza con la integración sin la autorización por escrito y cuando se reclama el pago ni la familia ni la obra social responde. Es por eso que a las familias con las que venimos trabajando el año anterior les solicitamos que comiencen a presentar las renovaciones de las prestaciones lo antes posible, así cuanto antes recibimos la autorización y podemos ponernos a trabajar en el caso.

Estamos inmersos en un sistema tan perverso que las víctimas somos todos y todas las personas que pertenecemos al mismo: obviamente, los mayores afectados son los niños y niñas que requieren del acompañamiento para poder ser incluidos en la comunidad. Eso lo tenemos claro. Pero tampoco somos los centros ni los profesionales los responsables de eso. Esperamos poder aunar esfuerzos para que todos y todas podamos superar estos tiempos difíciles sin desmerecer la responsabilidad y alcance que tienen las familias, centros de inclusión, profesionales, escuelas y obras sociales.



Lic. Tamara Saúl

Tamara Saúl

Se recibió de psicóloga con Diploma de Honor en la Universidad de Buenos Aires. Realizó la Carrera de Especialización en Psicología Clínica de la Discapacidad de la U.B.A. y cursos de posgrados de Psicoanálisis en la Escuela de Orientación Lacaniana, Universidad de Buenos Aires, Centro de Salud Mental Ameghino, Hospital Ramos Mejía, entre otras instituciones. Además de haber participado de carteles de investigación en psicoanálisis, grupos de estudio y de supervisión.

Su práctica clínica la desarrolló fundamentalmente en el ámbito hospitalario, ya que formó parte durante del equipo de Pareja y Familia del centro de Salud Mental n°3 ¨Arturo Ameghino¨ y del servicio Infanto-Juvenil del Hospital ¨Ramos Mejía¨.

En el ámbito privado, trabajó como acompañante terapéutica, y actualmente realiza atención individual, de pareja y familia con orientación psicoanalítica en su consultorio privado.

Es directora de la Institución En-causar Psi, en donde se desempeñó inicialmente como coordinadora y supervisora de acompañamientos terapéuticos domiciliarios y educativos.